La ministra de Patrimonio, María Fernanda Espinosa, inauguró un moderno centro de control en el Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre de Quito para evitar el tráfico ilegal de bienes culturales y patrimoniales del Ecuador.
La primera operación del nuevo módulo fue para el registro de un cuadro adquirido en un mercado local, luego de que el viajero propietario de la obra de arte cumplió con el chequeo de su vuelo internacional.
Tres técnicos del Instituto Nacional de Patrimonio (INPC) inspeccionaron en detalle la pieza, para verificar que este bien no pertenece al legado cultural del país. Así funciona este puesto de control durante las 24 horas del día.
La operación del referido moduló en el Aeropuerto Mariscal Sucre es parte del programa de Combate al Tráfico Ilícito de Bienes Culturales. El Ecuador, como parte de la Comunidad Andina y en base al acuerdo No. 588, implementó desde el 1 de octubre de 2010 el Formulario de Declaratoria de no Transportar Bienes Culturales no Patrimoniales, cuyo requisito es parte de la Tarjeta Andina que todos los viajeros reciben en el aeropuerto, previo a su entrada y salida del país.
El INPC informó que en el desarrollo de esta labor de control se decomisó una obra original de Eduardo Kingman que estaba a punto de salir del Ecuador. Este bien recuperado será entregado al punto de compra, porque este tipo de arte solo puede comercializarse en territorio nacional.
Las piezas patrimoniales pueden salir del país únicamente bajo autorización y para exposiciones públicas, pues pertenecen a todos los ecuatorianos.
Los turistas deben declarar bajo juramento que no incumplen con lo dispuesto, porque la violación a la ley puede acarrear prisión. “Esto es un punto importante en la lucha que mantenemos para proteger el patrimonio cultural”, manifestó la ministra Espinosa.