El presidente Rafael Correa mencionó que se prepara la Ley de Desarrollo Urbano, en la que los Municipios tendrán que trabajar en conjunto con el Gobierno central en políticas de crecimiento ordenado de las ciudades.
Para ello, adelantó, se creará una Superintendencia de Desarrollo Urbano, que será el ente que se encargará de vigilar el cumplimiento de la normativa.
En ese marco, explicó, que seguirá la política de cero tolerancia a las invasiones y aseguró que continuarán los desalojos en los asentamientos ilegales.
“Ahora cierta prensa nos quiere hacer aparecer que nunca hubo delincuencia en el país, pero el tráfico de tierras es crimen organizado, donde mafias cobraban por todos los servicios básicos sin ser dueños de la tierra. Por eso les digo no más a creerles a esta gente que estuvo aupada por ciertos partidos políticos”, expresó.
Posteriormente, el Presidente llegó al plan Socio Vivienda, ubicado en el sector de la Nueva Properina, en el noroeste de la ciudad, donde hizo la entrega de 128 departamentos de un total de 352 que se han construido en 27 bloques multifamiliares.
Los beneficiarios, en esta ocasión, son familias que habitaron en las riberas del estero Salado, ramal que actualmente es recuperado dentro del plan Guayaquil Ecológico, del Ministerio del Ambiente, que contempla, además, la construcción del parque Samanes y el proyecto ecológico Isla Santay.
Durante su retirada, Correa realizó una visita sorpresa al colegio réplica Vicente Rocafuerte y luego se dirigió a la subertación eléctrica Caraguay, que provee de energía a amplios sectores del sur de Guayaquil.
