El oleoducto que hace cuatro días sufrió una rotura y causó un derrame de 5.500 barriles de petróleo, en la provincia de Esmeraldas, reanudó su actividad luego de que los técnicos reemplazaron la parte dañada, informó este viernes la empresa Oleoducto de Crudos Pesados (OCP).
En un comunicado dijo que se ha avanzado en remediar el daño ambiental «así como atención a las personas afectadas» por el siniestro, en la zona de Wincheles, a unos 185 kilómetros al noroeste de la capital, donde el crudo llegó hasta un riachuelo. Las lluvias causaron un deslizamiento de tierra que cayó sobre la tubería y la rompió.
El evento no causó problemas a la exportación de petróleo.