A través de una carta abierta, el secretario de Comunicación, Fernando Alvarado, respondió a los cuestionamientos hechos por el director de Fundamedios, César Ricaurte, respecto a los aportes económicos que recibe la organización no gubernamental que dirige.
Alvarado, en la misiva, establece que “la carta aclaratoria de Fundamedios, publicada en su página electrónica y reproducida por ciertos periódicos, en realidad, es una excusa enclenque que ofende la inteligencia de quien la lee”. El alto funcionario aclara que son epístolas desesperadas de una fundación ahora obligada a dejar las sombras. “Justificar que la única relación con USAID es indirecta, es tan solo una ironía proclamada con cinismo. Admitir que forma parte de una coalición de ONGs es una inevitable aceptación ante las abrumadoras pruebas…”.
La coalición de ONG´s de la que habla Ricaurte en la misiva hecha pública el pasado sábado 25 de junio, recibe recursos directos de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo (USAID), canalizada privadamente a través de otra ONG denominada Grupo Faro. Según datos proporcionados por la Secretaría Técnica de Cooperación Internacional (Seteci), el proyecto de “Fortalecimiento de la sociedad civil” en el Ecuador está auspiciada por esta agencia cuya inversión total es de $2,6 millones.
Alvarado critica la actitud de Fundamedios, por ejemplo, cuando cuestiona ciertos casos de supuesta agresión a la prensa y oculta otros más graves de censura previa a periodistas que laboran en los medios de comunicación. Con relación al rol político que ha cumplido Fundamedios, el Secretario de Comunicación se pregunta ¿no es desestabilizador acusar sin pruebas que en Ecuador, la democracia y el respeto a los derechos humanos están en peligro y promover un ambiente de agitación social sin fundamento alguno? La organización se ha aliado a grupos políticos para criticar la gestión del presidente Rafael Correa, en reiteradas ocasiones, y ha callado, por ejemplo, sobre faltas evidentes en las que han incurrido ciertos canales de televisión.
Para muestra de ello, el 9 de junio pasado, cuando un equipo de EL CIUDADANO se comunicó con César Ricaurte para tener su versión sobre la transmisión de un asesinato a un vendedor ambulante, con imágenes violentas, sin ninguna censura y en horario abierto, por parte de Ecuavisa, Ricaurte calló. Incluso, se envió el video con la transmisión para pedirle un análisis, pero no hubo respuesta. El artículo 46 número 7 de la Constitución de la República dispone al Estado, adopte las medidas necesarias que aseguren a las niñas, niños y adolescentes, protección frente a la influencia de programas o mensajes, difundidos a través de cualquier medio, que promuevan la violencia.
Al final de la misiva, el Secretario Nacional de Comunicación, asegura que si la misión de Fundamedios, es transparente, como dice Ricaurte, debería “publicar sus sueldos por semejante apostolado y el rol de contribuciones de todos sus financistas”.