La autopsia realizada al adolescente mexicano de 14 años de edad, quien murió en la frontera con Estados Unidos este lunes a manos de un agente de la Patrulla Fronteriza estadounidense, reveló que el disparo fatal fue hecho a corta distancia.
«Su homicida estuvo del lado mexicano, pues se localizó un casquillo de bala calibre 40 milímetros en la escena del crimen», dio a conocer el Servicio Médico Forense de la Subprocuraduría de Justicia estatal para la zona norte de Chihuahua.
El portavoz de la Procuraduría de Justicia del estado de Chihuahua, Arturo Sandoval, señaló que el cuerpo de Sergio Adrián Hernández fue encontrado unos seis metros dentro de México.
La Policía Federal logró frustrar la presunta intención de efectivos estadounidenses de levantar los casquillos del arma que disparó un agente de Migración contra Hernández, para alterar la escena del crimen.
El casquillo de bala fue enviado al laboratorio de balística forense mexicano, donde se realizará el análisis correspondiente.