Guayaquil cuenta desde ayer con 600 militares para reforzar los controles antidelictivos en las calles.
Así lo anunció Jorge Gross, jefe de la Fuerza de Tarea Conjunta del Guayas (FTC-G), quien reveló que se llegó a esa cantidad tras la incorporación de 450 uniformados más provenientes de diferentes provincias del país. “Ese personal lo vamos a sacar de otros comandos”, aclaró.
Los otros 150 miembros de las Fuerzas Armadas realizan los patrullajes, desde la noche del domingo pasado, como parte de las medidas adoptadas por el Gobierno para reducir los índices de criminalidad en la ciudad.
El jefe de la FTC-G señaló que la decisión de incrementar el personal fue para extender los operativos durante las 24 horas del día. “Antes solo se vigilaba en la noche. Desde ayer comenzamos con horarios permanentes. El personal será distribuido en cuatro grupos con jornadas de 6 horas cada uno”.
Otra de las medidas anunciadas para combatir a la delincuencia tienen relación con el ofrecimiento de recompensas para quienes faciliten información sobre el paradero de los delincuentes.
“El presidente (Rafael Correa) dio la orden que se den los recursos económicos para pagar a informantes”, reveló Antonio Gagliardo, fiscal del Guayas, quien confirmó que en la reunión mantenida, el martes pasado, con las autoridades vinculadas al ámbito de seguridad se dio la disposición que un fondo (del cual no reveló el monto) sea utilizo en estos casos.
El jefe del Comando de Policía del Guayas, Miguel Chiriboga, enfatizó que en las filas de la institución del orden también se incrementará el número de uniformados. “La próxima semana tendremos 200 gendarmes más para Guayaquil. A ellos se sumarán otros 400 alumnos que vienen a realizar prácticas de agentes profesionales”.