Los senadores estadounidenses anunciaron este miércoles un acuerdo para aumentar el límite legal de endeudamiento de Estados Unidos, a pocas horas de que el país entre en riesgo de default, y ahora el pacto deberá pasar a consideración de la Cámara de Representantes.
El líder de la mayoría demócrata del Senado, Harry Reid, y el líder de la minoría republicana, Mitch McConnel, confirmaron el pacto en la cámara alta, mucho más propensa a evitar un default que sus colegas de la Cámara de Representantes, controlada por la oposición republicana.
Se trata de un «acuerdo histórico, consensuado para reabrir (servicios del) Estado y evitar un default», señaló Reid.
El pacto, anunciado por ambos líderes en el hemiciclo del Senado, ampliaría el límite de endedudamiento y reabriría inmediatamente las agencias federales, parcialmente cerradas desde el 1 de octubre, al tiempo que convocaría una comisión para negociar un presupuesto para 2014, señalaron legisladores republicanos.
Las dos cámaras deben adoptar el mismo texto en iguales términos antes de que sea firmado por el presidente Barack Obama y convertido así en ley.
El riesgo de un default
El Congreso estadounidense dispone de pocas horas para alejar el riesgo de un default que sería el primero en la historia de EE.UU.
En una fecha difícil de prever, pero que podría situarse entre el 22 y el 31 de octubre, según la Oficina de Presupuesto del Congreso, Estados Unidos ya no podría honrar los pagos programados, una situación sin precedentes que atemoriza a los mercados mundiales.
La pérdida de confianza podría poner en juego la suerte del dólar, moneda de reserva mundial, y la de los bonos del Tesoro, colocaciones consideradas como las más seguras del planeta.
El proyecto del Senado se enfrentará luego de ser votado a los conservadores del Tea Party en la Cámara de Representantes. Este sector ultraconservador de gran influencia en el Partido Republicano se opone a cualquier proyecto que no incluya recortes del gasto público y en particular recortes del presupuesto destinado a la reforma de la Salud de Obama aprobada en 2010.
¿Qué hará John Boehner?
Lo importante será saber ahora si el texto es avalado por el presidente republicano de la Cámara baja, John Boehner. Fuentes de ese sector señalaron que éste no opondría resistencia y aceptaría someter al pleno de la Cámara baja el acuerdo alcanzado en el Senado, pese a la oposición de una parte de la mayoría republicana. También debería obtener el apoyo de parte de los demócratas.
El martes, señal del nerviosismo creciente en el mundo ante este bloqueo, la agencia Fitch anunció que considera bajar la nota de la deuda soberana de Estados Unidos, actualmente la mejor posible (AAA).
La bolsa de Nueva York abrió al alza el miércoles
Esto es lo que pasará si no hay un pacto entre las dos Cámaras del Congreso:
17 de octubre: El dinero en efectivo con que cuenta el Tesoro se reduce a 30.000 millones de dólares, de los 88.000 millones que tenía a comienzos de mes.
Sigue cobrando impuestos y otros ingresos por lo que puede continuar pagando la mayoría de sus obligaciones, pero las entradas varían día a día, lo que hace difícil señalar exactamente si y cuándo se quedaría sin efectivo.
22 de octubre: Se estima que este sería el primer día que el gobierno estaría incapacitado de cancelar todas sus cuentas, aunque no debe hacer pagos importantes en esta fecha.
23 de octubre: El gobierno debe emitir cheques por 12.000 millones de dólares en prestaciones sociales, según el Bipartisan Policy Center (BPC), un centro de análisis de Washington.
24 de octubre: El Tesoro necesita refinanciar cerca de 93.000 millones de dólares en deuda. Si bien la operación no representa un nuevo gasto para el Departamento del Tesoro, pues se trata de pagar a los acreedores con bonos, ello implica algunos riesgos, sobre todo a largo plazo.
El 31 de octubre: El Tesoro tiene que pagar 6.000 millones de dólares en intereses de deuda del gobierno, así como refinanciar 115.000 millones de dólares en bonos.
1 de noviembre: El gobierno debe desembolsar más de 55.000 millones de dólares para pagos del Medicare (servicio médico a personas de bajos recursos) y prestaciones sociales, así como de salarios de miembros activos y retirados de las Fuerzas Armadas.