Unos 170 ecuatorianos quieren pasar de vendedores ambulantes a promotores de la gastronomía andina. Son aquellas personas que cada fin de semana montan sus puestos de comida en Casa de Campo y que ahora buscan los permisos para su actividad. La Secretaría Nacional del Migrante (Senami) les dará un curso gratuito de manipulación de alimentos y les brindará todo el apoyo necesario para que se organicen y consigan un lugar apropiado para promocionar la comida y la cultura ecuatoriana en Madrid.
“Compatriota ecuatoriano si no quieres que desaparezcamos, colabóranos con la limpieza”, reza el volante que están repartiendo los vendedores de La Casa de Campo, desde el pasado fin de semana. Esto es el inicio de una cruzada para evitar que la Policía Municipal los expulse del parque. Al frente de la iniciativa están catorce personas que empezaron su venta ambulante en El Retiro y en el Parque del Oeste y que ahora quieren convertirse en promotores de la gastronomía y la cultura ecuatoriana y conseguir un lugar apropiado para desarrollar su actividad.
El Servicio de Dinamización de Espacios Públicos de Moncloa lleva un año y medio trabajando en Casa de Campo. Su trabajo de mediación ha permitido que vendedores, asociaciones de inmigrantes, agentes de medioambiente y policías municipales se sienten a dialogar en la misma mesa. La Policía Municipal, sin embargo, comunicó en la última reunión que todos los vendedores serían desalojados el 11 de julio.
La Secretaría Nacional del Migrante (Senami) se ha unido a la lucha de los vendedores ambulantes. Lo primero ha sido patrocinar un curso de manipulación de alimentos, en el que ya se han apuntado 170 personas que habitualmente trabajan en Casa de Campo. A continuación se apoyará a los vendedores para que formen una asociación que ya tiene nombre: la Asociación de Vendedores Ambulantes Ecuatorianos en España.
El principal objetivo de esta asociación será conseguir todos los permisos y un sitio para vender la comida típica de Ecuador. Esto será un proceso largo. Los vendedores lo saben. Guillermo Imbaquingo, que lleva 11 años vendiendo comida con su esposa y sus dos hijos, es parte de la comisión organizativa. “No es el primer intento”, cuenta.
Los ocho países integrantes de la Alternativa Bolivariana para los pueblos de nuestra América (ALBA) podrán realizar las transacciones a través de un sistema web en línea, datos que van a los bancos receptores de los países miembros, los mismos que verifican la información y de inmediato el sistema permite la conexión con el Banco del ALBA.