Una vez anunciada la sentencia que absuelve a los policías acusados por intento de magnicidio en el caso Carrión, el Ministerio del Interior anunció que demandará por “prevaricato” a los jueces del Tribunal 5to de Garantías Penales de Pichincha que dictaron esta medida.
En rueda de prensa, José Serrano, ministro del Interior denunció la inobservancia que hicieron los jueces de este Tribunal en cuanto a las pruebas que la parte acusadora mostró, las mismas que inculpaban a César Carrión, Luis Bahamonde, Luis Martínez y Jaime Vinicio Paucar, todos policías que se encontraban procesados por el delito de tentativa de asesinato al presidente Rafael Correa.
Los hechos de los cuales se los acusa sucedieron el 30 de septiembre del 2010. Los procesados fueron inculpados en diverso grado en el delito mencionado por diversos testigos presenciales. Estos testimonios acusatorios, a su vez, se respaldaron en diversas pruebas documentales y audiovisuales que el fiscal Luis Enríquez les mostró en reiteradas ocasiones.
Pese a ello, los jueces Hugo Sierra, Jacqueline Pachacama y Luis Fernández absolvieron a los acusados.
En ese contexto, el ministro Serrano adelantó que se apelará la sentencia, pero también denunció la actuación parcializada de los jueces que, incluso, amenazaron con iniciar procesos penales contra los testigos Richard Piedra y álex Casierra, miembros de la seguridad de la Presidencia, por supuesto perjurio.
En esta denuncia lo acompañaron Johana Pesántez, ministra de Justicia y Vicente Peralta, secretario Jurídico de la Presidencia (e).
El ministro Serrano solicitará a la Fiscalía, que inmediatamente proceda a la apelación de esta sentencia, que no tiene piso legal, en vista que las pruebas presentadas son por demás claras y que demuestran la culpabilidad de los cuatro acusados del intento de magnicidio al Jefe de Estado e intento de propiciar un golpe de estado.
Además, el Ministro indicó que tienen la información suficiente que demuestra que la jueza Jacqueline Pachacama intentó plantear un juicio penal de los testigos, lo que demuestra que todo estaba premeditado.