El sismo de magnitud 7,1 que sacudió el centro de Chile y es considerado por especialistas como una réplica del terremoto 2010, dejó un saldo de 14 heridos y unas 25.000 personas evacuadas por riesgo de tsunami, que revivieron el temor por una posible crecida del mar.
Los expertos del Servicio Sismológico Nacional explicaron que el movimiento telúrico, registrado la tarde del domingo y que sacudió 1.300 kilómetros del territorio chileno, es una réplica tardía del terremoto del 27 de febrero (de magnitud 8,8).
“Hay que recordar que después de un sismo de las características del 27 de febrero, inclusive pueden esperarse réplicas después de cinco años”, señaló el jefe nacional de la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi), Miguel Ortiz.
Además, el experto explicó que el movimiento del domingo fue un sismo de mayor intensidad y no un terremoto, porque no tuvo un impacto directo en las personas o la infraestructura.
Según el último balance de la Onemi, el movimiento telúrico dejó un saldo total de 11 lesionados en la Región del Maule, 2 en la Región Metropolitana y 1 en el Biobío. Además, 24.283 personas fueron evacuadas de forma preventiva entre las regiones de Valparaíso y Biobío.
El funcionario de la Onemi consideró además como tangencial al temblor la muerte de José Roberto Rebolledo, en la región del Maule, a quien le sobrevino un infarto cardiaco en el momento del sismo.
Inmediatamente después del sismo, la Onemi decretó una evacuación preventiva que fue cancelada minutos después, cuando el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada descartó el riesgo de tsunami.
Sin embargo, luego de algunas observaciones que detectaron un recogimiento del mar de unos 40 metros, la Onemi reactivó la evacuación en el Maule durante unas dos horas. En otras regiones, muchas personas se evacuaron voluntariamente para resguardarse.
El sismo, la caída de los sistemas de comunicación y las órdenes de evacuar por temor a un tsunami hicieron revivir el temor de muchos chilenos damnificados por el anterior terremoto y posterior tsunami ocurrido en 2010, que causó 524 muertos, 800.000 damnificados y daños por $ 30.000 millones en seis regiones de Chile. Un centenar de ellos decidió pasar la noche en puntos elevados frente a la costa de Constitución, uno de los balnearios que más sufrió con el tsunami de 2010. La Onemi informó que se han reportado 18 réplicas producto del sismo del domingo, la mayor de las cuales registró una magnitud de 4,7.
Paralelamente, unas 8.000 personas fueron afectadas por cortes en el suministro eléctrico, que ya se encuentra restablecido. En la localidad costera de Constitución, cercana al epicentro del sismo, se suspendieron las clases para evaluar los daños en las escuelas.
En declaraciones desde Corea, donde asiste a la II Cumbre de Seguridad Nuclear, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, confirmó ayer que la situación está “bajo control” y resaltó que el Gobierno prepara un plan de contingencia para ayudar a los sectores afectados.