El trabajo que realizan los técnicos del Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias, (INIAP), conjuntamente con los fruticultores de la provincia del Tungurahua, ha hecho posible que entre el 60 y 70 % de la tecnología producida por el Programa de Fruticultura en duraznero esté en manos de los productores de esta provincia.
Aníbal Martínez, jefe del programa de Fruticultura de la Sierra Centro, señaló que se han introducido varios componentes tecnológicos en las plantaciones del duraznero como: tratamientos pre -foliares, desinfección de yemas, podas, controles de plagas y enfermedades que han dado como resultado que los costos de producción bajen y se obtenga una alta productividad por árbol.
Con la variedad “Conservero Amarillo”, recomendada por el INIAP cada planta, aplicando la tecnología del INIAP, explica Martínez, está dando unos 40 kilos como mínimo, esto significa dos cajas por árbol, con fruta de calidad para el mercado.
Otra variedad recomendada por el INIAP, adaptada a las condiciones de la provincia de Tungurahua, es la variedad “Diamante”, que tiene como características un mayor número de frutos por planta que el “Conservero Amarillo”; además, dura de 20 a 25 días, después de su cosecha en buenas condiciones de mercadeo.
Se calcula que con la tecnología que ha generado el INIAP se tiene una producción de 60 a 70% más que con la tecnología tradicional.
La provincia de Tungurahua tiene unas 500 hectáreas de duraznero y produce el 80% de la producción nacional.