El terremoto que sacudió el norte de Italia la madrugada del domingo con una magnitud de 5,9 grados en la escala Richter, causó la muerte de al menos seis personas y heridas a otras 50, además de numerosos daños materiales, informaron fuentes de la Protección Civil.
El movimiento telúrico se registró a las 04:04 locales (02.03 GMT) en la región de Emilia-Romagna (norte de Italia), que fue sentido también en otras zonas como Toscana, Véneto, Lombardía, Tretino Alto Adigio y Friuli Venezia Giulia.
En la fabrica de Bondeno, en la provincia de Ferrara, región de Emilia Romagna, falleció un trabajador marroquí de 29 años, que terminaba su turno a las cinco de la madrugada, y a quien le cayó una viga en la cabeza al derrumbarse la nave industrial que, sin embargo, no causó heridas a otros trabajadores.
Otros dos obreros murieron cuando trabajaban en el departamento de cocción de la fábrica de cerámica de San Agostino y se les vino la techumbre encima.
En tanto que una mujer alemana, que se encontraba en Italia por motivos de trabajo, murió en San Alberto de San Pedro en Casale, en Bolonia, probablemente a causa de una crisis provocada por el miedo durante el sismo, informó el Comando Provincial de los Carabineros de Bolonia.
Del pavor falleció también una mujer de más de 100 años de San Agostino, informan fuentes médicas.
Un trabajador Tecopress, una fundición de ciclo continuo en Dosso, barrio de San Agostino, apareció muerto de entre la ruinas del techo de la fábrica que se desplomó.
Los datos provisionales de Protección Civil apuntan a unos 50 heridos en toda la zona noreste de Italia.
Una hora después del terremoto de magnitud 5,9, sentido en todo el noreste de Italia, se produjo una réplica de 4,9 grados en la escala Richter en el norte de la provincia de Módena a las 05.03 hora local (03.03 GMT), que ha producido derrumbamientos de algunas fábricas en Bondeno.
También la iglesia de San Felice sul Panaro, en la provincia de Módena, se ha venido abajo tras el fuerte temblor, asegura Protección Civil.
También se han detectado graves daños materiales en Ferrara, donde se han reportado a la policía y protección civil derrumbamientos de numerosos edificios históricos y viviendas.
El terremoto de 5,9 grados de magnitud en la escala de Richter fue revisado por el Servicio Geológico de EEUU (USGS) que estableció una magnitud de 6 grados y a una profundidad de 5,1 kilómetro, en lugar de los 10,1 kilómetros que dio previamente.
El temblor, que tuvo su hipocentro a 5 kilómetros al este de la localidad de San Felice sul Panaro, según el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología de Italia, estuvo precedido por otros dos sismos, uno de 4,1 a las 23.13 GMT del sábado -unas tres horas antes del principal- y otro, de 2,2 grados, a las 23.43 GMT.
En varias ciudades muchas personas se echaron a la calle presas del pánico al sentir el temblor, que duró unos veinte segundos.
Los italianos han revivido el terremoto de Los Abruzos (centro de Italia), que el 6 de abril de 2009 con una magnitud de 5,8 grados en la escala Richter provocó la muerte de 308 personas, 1.600 heridos y miles de desplazados y devastó pueblos de la región y el centro histórico del L'Aquila.
A primeras horas de la mañana, se ha restablecido el tráfico ferroviario de las principales líneas de la zona golpeada por el sismo.