Cerca de 300 trabajadores de las haciendas Clementina, álamo, Julia y de dos más que no se identificaron acudieron la mañana de ayer a realizar un plantón en los bajos del edificio del Servicio de Rentas Internas (SRI) para pedir que se revea la decisión de cobrar los impuestos a la Empresa Bananera Noboa (EBN).
Estas haciendas forman parte de las 60 fincas que tiene la exportadora para abastecerse de la fruta. El SRI emitió medidas cautelares sobre los bienes de la bananera y su propietario álvaro Noboa.
El plazo para el pago de los 99,2 millones de dólares del impuesto a la renta causado y no pagado al fisco termina este viernes, de lo contrario se ejecutará el embargo.
Ayer, en horas de la mañana fue presentada la segunda notificación de las tres que esperan entregar los funcionarios del SRI para pedir el pago de los tributos evadidos.
Los trabajadores no conversaron ni pidieron diálogo con ninguno de los trabajadores del SRI, solo se limitaron a llevar dos ataudes pintados de negros y portar camisetas del mismo color.
Bernardo Manzano, gerente de la hacienda Claudia, dijo que los trabajadores se sienten “nerviosos” y que temen por la estabilidad. “Se corre una serie de rumores infundados y por voluntad propia están aquí, para que no pase nada de lo que temen”.