El Alto Tribunal de Malasia emite mañana, jueves, el fallo del juicio contra los tres hermanos mexicanos González Villarreal, encarcelados y acusados de narcotráfico, delito que la ley de este país asiático castiga con la muerte en la horca.
Luis Alfonso (47), Simón (33) y José Regino (36) fueron detenidos el 4 de marzo de 2008 en una redada realizada por la policía malasia en la ciudad de Johor, junto a un ciudadano malasio y otro singapurés.
En la operación policial los agentes de la brigada antinarcóticos se incautaron de unos 29 kilos de metanfetamina, una alijo valorado en 15 millones de dólares.
Los hermanos, originarios del Estado de Sinaloa, conocerán después de un año de juicio el fallo del Alto Tribunal de Kuala Lumpur presidido por el magistrado Mohamed Zawawi.
Kitson Foong, uno de los abogados de los hermanos mexicanos, se ha mostrado «cautelosamente optimista» de cara al desenlace de este proceso judicial dirigido por Zawawi, apodado el «juez soga» por las numerosas penas a muerte que ha pronunciado en casos de tráfico de droga durante su dilatada carrera en la judicatura.
El proceso ha estado salpicado de continuos retrasos, los últimos con la fecha para la vista de la sentencia, que primero se fijó el 18 de abril y se cambio al 4 de mayo y, finalmente se aplazó hasta la mañana del viernes 17 de mayo.
En caso de que sean declarados culpables los mexicanos tendrán opción a recurrir la sentencia ante el Tribunal de Apelaciones y, en última instancia, ante el Federal, un proceso que puede alargarse muchos años.
Entretanto, permanecerán encarcelados en el corredor de la muerte del penal de máxima seguridad de Sungai Buloh, ubicado entre campos de plantaciones de palmeras y a unos 50 kilómetros de Kuala Lumpur.