El debate de las 11 comisiones plenarias de la Ecuarunari concluyó cerca de la medianoche del sábado. Y luego de ello, las delegaciones indígenas provenientes de las 10 provincias de la Sierra, más Esmeraldas, Guayas y Zamora Chinchipe que asistieron al IV congreso efectuado en Saquisilí (Cotopaxi), dieron paso a la elección de los integrantes del nuevo Consejo de Gobierno, incluido el presidente de la organización que representa a los pueblos kichwas del país.
Los asistentes al encuentro decidieron que la elección se realizara por medio de sufragio (y no por aclamación), con el fin de buscar transparencia en el proceso. Y pese a que las disputas surgidas entre distintos dirigentes en los días previos a la instalación de la cita hacían presagiar un procedimiento largo y tortuoso, las delegaciones necesitaron votar una sola vez.
Tras el conteo, alrededor de las 03:30 de este domingo se conoció que Carlos Pérez Guartambel, candidato por la provincia del Azuay, ganó la presidencia de la Ecuarunari con 596 votos. En segundo lugar, para sorpresa de muchos, quedó el aspirante chimboracense Alberto Yumbay, con 236 votos. La figura de Yumbay, quien había arrancado la contienda como favorito, generaba a la vez mucho rechazo, pues se le ha atribuido una presunta vinculación con el partido de Gobierno, Alianza PAIS (AP), en un supuesto intento del régimen para dividir a la organización indígena.
A Pérez se lo conoce por sus actividades, a veces polémicas, en defensa de la naturaleza. Ha sido activista en contra de la minería a cielo abierto y en lo que él llama defensa de las fuentes de agua. Esta última faceta lo llevó a cumplir una sanción de ocho días de cárcel en compañía de otros dos dirigentes indígenas y campesinos azuayos (Efraín Arpi y Federico Guzmán) en este año, por el cargo de interrumpir servicios públicos.
Esto ocurrió a raíz de las protestas que lideraron en contra del proyecto de Ley de Recursos Hídricos (ley de aguas) el 4 de mayo del año 2010. En aquella fecha fueron detenidos por la Policía cuando obstaculizaban el paso de vehículos y transeúntes en el sector de la Y, de la parroquia Tarqui (Azuay).
Y a consecuencia de ello, Pérez y sus acompañantes fueron acusados inicialmente por la Fiscalía del Azuay de sabotaje y terrorismo. Por ese cargo fueron sentenciados a cumplir un año en prisión correccional y al pago de $44, pero se consideró como atenuante que se trata de personas «que no constituyen peligro para la sociedad y que las motivaciones para su conducta fueron de carácter altruista», por lo que se les impuso la citada pena de ocho días.
Esta condena la cumplieron durante cinco días a finales de marzo. Los otros tres días les fueron descontados del tiempo que permanecieron detenidos luego de su aprehensión.
Pérez aboga también por la recuperación de las tierras que por tradición les han pertenecido a los pueblos indígenas del Ecuador.
La vicepresidencia de la Ecuarunari quedó en manos de Marco Guatemal, de Imbabura, presidente de la Federación de Pueblos Kichwas de la Sierra Norte, quien también se ha opuesto a la Ley de Aguas promovida por el Gobierno. Guatemal fue elegido unánimemente.
El nuevo vicepresidente es también un defensor de la naturaleza y, al igual que Pérez, ha estado en la cárcel por su activismo. En el último trimestre de 2011, fue procesado por el delito de sabotaje y terrorismo, acusado de cerrar carreteras, y se le dictó una boleta de prisión preventiva. Fue absuelto y liberado el 9 de noviembre de 2011.
Tras la elección y al no haber desacuerdos, las diferentes delegaciones abandonaron el Coliseo de Deportes de Saquisilí, lugar donde se realizó la elección, para retornar a sus diferentes provincias.