Una relavera comunitaria, para almacenar los desechos mineros se construirá en el distrito Zaruma-Portovelo, en la provincia de El Oro (sur del país). Este miércoles se firmó un convenio para la construcción de la misma.
La contaminación de los ríos Amarillo y Calera se ha constituido en un problema local y con connotaciones internacionales, pues sus aguas desembocan en territorio peruano.
La construcción de la relavera tendrá un costo de unos cinco millones de dólares. Estará ubicada en el sector conocido como El Tablón, donde ocupará un área de 120 hectáreas de llenado. Se estima una vida útil de entre 40 y 50 años; es decir, que durante todo ese tiempo, recibirá los desechos que quedan luego del tratamiento que los mineros realizan para recuperar el mineral.
El ministro Coordinador de Sectores Estratégicos, Jorge Glas, indicó que la obra se financiará con las regalías mineras que recibe el Estado. Sirven, dijo en referencia a las regalías, para corregir lo que pasó y para hacer obras que nos saquen de la pobreza.
Glas manifestó que el Gobierno apoyará este proyecto, así como la construcción de la segunda fase, e indicó que si faltan recursos incluso se adelantarán dineros de las regalías, que las administra la empresa Ecuador Estratégico.
Para el viceministro de Minas, Federico Auquilla, esta relavera es el primer paso porque después se construirá el Parque Industrial Minero, con el cual se busca dar una solución definitiva al problema de la contaminación.
Indicó que proyectos similares se construirán en las zonas mineras del cantón azuayo de Camilo Ponce Enríquez, así como en la provincia de Zamora Chinchipe, tras agregar que no se permitirá que proliferen las plantas de beneficio (sitios en los cuales se trata el mineral) que contaminen.
El director del Instituto Nacional de Investigación Geológico Minero Metalúrgico (Inigemm), Colón Velásquez, consideró que con un tratamiento adecuado a los relaves Portovelo será un ícono de la pequeña minería a nivel mundial.
Precisamente el Inigemm será el ente encargado de la fiscalización. Velásquez sostuvo que están poniendo al servicio de la comunidad la ciencia y la tecnología para resolver el problema de contaminación.
El Inigemm, entidad adscrita al Ministerio de Recursos Naturales No Renovables, fue seleccionado para realizar la fiscalización debido a la experiencia de sus técnicos, quienes realizaron estudios geológicos, geomorfológicos, interpretación por sensores remotos de la zona de Zaruma y Portovelo, interpretación de amenazas geológicas, caracterización de relaves de la cuenca Puyango Tumbes, y levantamiento topográfico de detalle, de diseño de la presa en tercera dimensión.
Según Danilo Castillo. presidente de la Asociación de Propietarios de Plantas de Beneficio (Aproplasmin), a la relavera irán los desechos de un 80% de los mineros que trabajan en las zonas de Zaruma, Portovelo, Piñas y Atahualpa, con lo cual aspira reducir significativamente la contaminación. El prefecto de El Oro, Montgomery Sánchez invocó a los mineros a realizar una actividad responsable social y ambientalmente.