Venezuela perdió su derecho a voto en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas debido al atraso acumulado en el pago de las contribuciones que le corresponden como miembro de ese ente internacional.
En una carta enviada el 15 de enero por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, Venezuela estaba incluida en una lista de 22 países que habían caído en situación de mora con la organización al haber acumulado una deuda igual o superior a la suma de todas sus cuotas correspondientes a los dos años anteriores, por lo cual se le debía aplicar la suspensión de su derecho a voto en la Asamblea General, de acuerdo con lo previsto en el artículo 19 de la Carta de la ONU.
En la lista remitida por el secretario general se incluían cinco países (Comoras, Guinea-Bissau, la República Centroafricana, Somalia y Santo Tomé y Príncipe) a los que la Asamblea les mantuvo el derecho a voto por considerar que el retraso en sus pagos se debe a circunstancias ajenas a su voluntad. En ese mismo texto se señala el monto mínimo que debía pagar cada Estado para recuperar su voto y Venezuela aparece con la cantidad más alta: 5 113 575 dólares. Sin embargo, según confirmó ayer la Secretaría General, la deuda total de la nación con la ONU asciende a 51 522 492 dólares, de los cuales 28 000 684 se corresponden con el pago de las contribuciones ordinarias que se debe hacer para colaborar con el presupuesto de la organización.
Entre enero y marzo, 12 de los 17 países que habían sido incluidos en la lista de Ban y a los que no se les había otorgado prórroga realizaron los pagos pendientes y recuperaron su derecho a voto. La suspensión de Venezuela está en vigor desde por lo menos el 22 de marzo, cuando la Asamblea General hizo pública una lista de cinco países morosos a los que se les suspendió su derecho a voto: Venezuela, República Dominicana, Sierra Leona, Vanuatu y Zimbabwe.
Funcionarios de la misión de Venezuela en la ONU dijeron que sobre esta situación sólo podía hablar el embajador Jorge Valero, quien ayer no estuvo disponible para ser consultado. La sanción aplicada por la ONU impidió a Caracas participar en la votación del martes en la que se aprobó el Tratado de Comercio de Armas.
A pesar de ello, un representante de Venezuela sí hizo uso durante la sesión del derecho a voz –que no ha sido afectado– para señalar que aunque el país estaba comprometido con la idea de controlar el comercio ilegal de armas, había asuntos que no habían sido regulados en el Tratado como la sobreproducción y la acumulación por parte de los principales fabricantes de armamento, razones por las cuales Venezuela deseaba abstenerse. Pero no lo pudo hacer. Su voto fue registrado como ausente.