Según la Asociación Ecuatoriana Automotriz (AEA), el mes pasado se colocaron 8.254 unidades, es decir, 3.046 menos que en el mismo periodo del 2011. La cifra es inferior al promedio de carros que se venían colocando mensualmente y que estaba entre 9.000 y 11.000 unidades.
Con la caída de septiembre, las ventas acumuladas hasta ese mes llegan a 89.509 unidades y eso representa un descenso de 15,63% frente al mismo periodo previo, cuando se vendieron 106.096.
Manuel Murthino, gerente de la AEA, atribuyó el bajón de las ventas a los cupos de importación que tiene el sector automotor y que inciden en una menor disponibilidad de unidades. Además, dijo que la ley hipotecaria –que contempla la devolución del vehículo si el comprador no puede seguir pagando la deuda– es otro factor que influye en un descenso en el comercio de este bien.
El complejo panorama que atraviesa el ramo automotor, incluso, ha llevado a cancelar por segundo año consecutivo el Autoshow que se realizaba en octubre en Guayaquil, y la exposición que se efectuaba en noviembre en Quito.
Gloria Navas, presidenta de la Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador, explicó que al no haber una suficiente oferta que presentar y por las bajas ventas es difícil invertir en eventos como los autoshows.
La empresaria consideró que la tendencia descendente en las ventas seguirá en este último trimestre, debido a que algunas compañías están al límite de sus cupos. “El no tener la gama de vehículos que a veces las personas buscan, en muchos casos, influye en la caída de ventas”, afirmó Navas, quien anticipó que al final del año la disminución podría estar cercana a las 20.000 unidades.