La conexión terrestre entre Quito y las provincias de Imbabura y Carchi, a través de la vía que conecta con la parroquia Guayllabamba (norte de la ciudad), continuará interrumpida de manera indefinida.
Así lo dio a conocer la Secretaría Metropolitana de Seguridad, entidad que informó que aunque se ha logrado despejar gran parte del material desprendido de un talud la mañana de domingo, bloqueando la carretera, el paso por la zona no será reabierto pues todavía no es seguro para conductores ni vehículos.
Esto porque según cálculos de técnicos de la empresa Panavial, firma a cargo de la concesión de la carretera Panamericana, alrededor de 2.500 metros cúbicos de tierra y rocas todavía se encontrarían sueltos en la pendiente y con posibilidad de continuar cayendo.
El director provincial de la Secretaría Nacional Gestión de Riesgos (SNGR) en Pichincha, Oswaldo Echeverría, confirmó estos datos a la agencia de noticias del Municipio.
El funcionario indicó que ante este panorama se han planteado dos alternativas para provocar el descenso de material restante en los próximos días: la utilización de explosivos o descargas de agua mediante el uso de helicópteros.
Mientras tanto, las tareas para despejar la ruta y provocar la caída de rezagos se reiniciaron a las 06:00 de ayer, luego de que fueran suspendidas al anochecer del domingo a consecuencia de la espesa neblina que cayó en la zona. Así se determinó luego de que técnicos de la concesionaria y de la SNGR ascendieran a la cumbre de la montaña afectada para evaluar la situación.
Hasta que culmine esta emergencia, las autoridades municipales recomiendan a los ciudadanos que viajen desde el extremo de la Sierra Norte a la capital, tomar vías alternas para ingresar a la ciudad.
Una recomendación es que se ingrese a la ruta E-35 a través de la «Y» de Cusubamba para dirigirse a Pifo y de ahí hacia el sector de El Colibrí, para llegar a Quito por la autopista General Rumiñahui, en caso de querer llegar al centro o sur de la ciudad. También en Pifo se puede tomar la vía Interoceánica y, atravesando la parroquia Cumbayá, ingresar a la urbe por el túnel Oswaldo Guayasamín. O desviarse hacia el norte a la altura de la misma Cumbayá por la avenida Simón Bolívar, para desembocar en la Panamericana cerca de Carapungo (ver mapa).
Otra opción es llegar antes del puente del Pisque y tomar la vía a Malchinguí; en esta, antes de Perucho, se debe tomar la vía de segundo orden que conduce a la Mitad del Mundo. En ese punto, el tráfico resulta fluido luego de que concluyeran los trabajos de construcción del intercambiador de la zona de El Condado.
Entre tanto, el bloqueo de la Panamericana ha incrementado el flujo de vehículos en las vías que conectan a la ciudad con el aeropuerto de Tababela, pues las rutas alternas de ingreso a Quito son las mismas que se utilizan para trasladarse desde y hacia el aeródromo.
DATOS
El deslizamiento de tierra ocurrió alrededor de las 09:20 del domingo, un poco más al norte del peaje de Oyacoto y antes de llegar a la parroquia de Guayllabamba.
El hecho, que no causó víctimas, provocó el bloqueo de ambos carriles de la Panamericana Norte.
Según versiones de la Policía, el hecho fue reportado por los ocupantes de un bus de la cooperativa Flota Pichincha.
La unidad de transporte habría cruzado por la zona del desprendimiento unos minutos antes del suceso, lo que evitó que se produjera una tragedia.
