Previo a las elecciones del 17 de febrero, los medios de comunicación fijaron secciones especiales para tratar noticias dirigidas únicamente a las campañas electorales. Esto en pro de la cobertura de cada uno de los candidatos a presidente y demás identidades políticas.
Diario La Hora hizo una sección denominada «Elecciones 2013′ en donde se mostraron fotografías de los presidenciables en este orden: Rafael Correa (PAIS), Norman Wray (RUPTURA), Alvaro Noboa (PRIAN), Nelson Zavala (PRE), Guillermo Lasso (CREO), Lucio Guitérrez (PSP), Mauricio Rodas (SUMA), Alberto Acosta (UPI). Al clickear en cualquiera de éstas fotos, lo que se obtenía era información sobre el proceso de inscripción de los partidos.
Además de ésto presentaba una nota de cada binomio. Lo que se publicaba en ésta parte era información biográfica de los candidatos a presidente y vicepresidente. Se publicaron noticias generales sobre las campañas electorales y presentaban al margen derecho una encuesta que refería a la pregunta: «¿Está usted de acuerdo que personajes de la farándula sean candidatos para asambleístas?»; presentan en este misma ubicación un foro en donde se discute lo siguiente: ¿Cree usted que la SENAIN debe investigar a tuiteros por supuestos insultos a Rafael Correa?; ¿Qué opina usted del juzgamiento en el caso 10 de Luluncoto?; ¿Qué opina usted de los candidatos a la Presidencia de la República?
Bien podríamos decir que estas preguntas, implícitamente, responden a un subtexto coyuntural en el que el gobierno no queda tan bien parqueado (uno podría pensar que es causado), pero supongo que eso ya es ponerse exquisito… Sólo supongo.
En fin…
Por su parte, el diario El Ciudadano contaba con una sección que archivaba noticias sobre las campañas de los distintos candidatos. Aquí no se personalizaba sobre ninguno de los presidenciables. La página que manejó el diario es Elección Ecuador.
Diario El Universo presentaba una sección de nombre «Elecciones Ecuador 2013′ que bien podría tomarse como cuaderno aparte porque manejaba categorías distintas que tomaban el formato de cuadernillo. La información era presentada desde las generalidades hasta lo más específico de cada uno de los partidos e identidades políticas.
En la sección de «Candidatos Presidenciales» se hacía una nota de cada uno con género de crónica y al margen derecho se presentaba el plan de trabajo. Debajo de la fotografía de cualquiera de los candidatos a presidente se encontraba un rectángulo, que al clickear, ofrecía información sobre el binomio respectivo.
El género que utilizaba para reunir información sobre los candidatos a vicepresidente era la entrevista pregunta/respuesta.
Diario Hoy tenía también una sección sobre las campañas electorales denominada «Vote Bien«. Esta sección, al igual a El Universo, se podría tomar como cuadernillo, pues se presentaban distintas categorías que respondían a las estadísticas en candidatos favoritos, Información sobre binomios, asambleístas y asambleístas provinciales.
Al ingresar a alguno de los presindeciables, existían íconos que reemplazaban sus propuestas; y al desplazar el mouse sobre estos íconos, se extendía en la parte inferior, la explicación de la propuesta. Además de esto se presentaba el plan de trabajo y el perfil de cada uno de los candidatos a presidente.
Ahora bien, hubo dos medios que trataron la información de las campañas electorales con ciertas posturas sesgadas implícitamente. Esto se percibe por su forma de presentar la nota y por el tratamiento de la información en cada uno de los candidatos a presidente.
El Telégrafo es uno de los medios que trató de forma sesgada la información, pues se realizaron artículos de opinión en la sección de «Noticias». En este punto existen irregularidades de -forma-, pues se emiten juicios de valor en un género que no permite estas características. Lo podemos constatar en el artículo de opinión que se le hace al candidato Guillermo Lasso en ésta cita: «Tuve la tentación, un morboso sarcasmo, de definirlo por lo que encarna: banquero. Llegué a simplificar las complejidades innatas de un candidato que parece ser construido a partir de un manual extranjero redactado para el candidato perfecto. Su cosmovisión no está definida por la banca. No está definida por las finanzas. Estas son consecuencias de una naturaleza, una esencia, que ha determinado su propia concepción de la realización personal. Guillermo Lasso está definido por el dinero».
Más allá de que sea comprobable o no, no citó ninguna razón aparente en la que se pueda ligar lo imparcial del párrafo. Este mismo modelo de redacción siguen otros seis candidatos a quienes se les hizo la nota. El sesgo se podía notar en alguno de los titulares.
Para Guillermo Lasso: «El banquero Lasso, el candidato Guillermo«; en el caso de Alvaro Noboa: «El 'híper empresario' que se resiste a perder»; sobre Lucio Gutérrez se tituló: «Un populista de derechas«; Norman Wray tiene un titular que además de notarse un sesgo, utiliza un epíteto muy personal: «La rebelión de un nerd o Norman Wray en su salsa«; y por último, Nelson Zavala: «La ciudad de Dios«.
Mauricio Rodas tenía un titular que no denotaba un sesgo peyorativo: «El discurso de la 'œplena' neutralidad«, pero dentro de la nota se apreciaba una redacción que está muy lejos de ser una información imparcial: «De manera muy similar a la de un ex presidente derrocado en nuestro país, el candidato de SUMA afirma muy suelto de huesos que cuando se hace una propuesta electoral «no solamente hay que decir el 'qué', sino también el 'cómo'». Y eso nos recuerda, aunque sea levemente, aquella época en que no solo supimos que se hundía el Titanic, sino también cómo se hundía, pero igual nos ahogamos, porque estábamos dentro».
Las redacciones a cada uno de los presidenciables tiene la sátira necesaria y la creatividad justificada para colocarse en una sección de opinión, incluso para ser catalogada de muy interesante, pero el error es que se ubique dentro de las noticias.
La sección que dedicó El Telégrafo a las noticias sobre las campañas electorales fue Voto 2013, aquí, además de los artículos analizados en los párrafos anteriores, se archivan noticias y se colocan encuestas sobre el candidato favorito de los electores.
En el caso del diario El Comercio se hizo una presentación dinámica de la información. Cada uno de los candidatos contaba con una fotografía en plano entero, en donde se colocaban puntos azules en lugares estratégicos de la imagen. Al clickear estos puntos, aparecían párrafos con estos subtítulos: «Su pensamiento», «Lo que quiere olvidar», «Su patrimonio», «Su fortaleza», «Sus hábitos y familia», «Con quién camina» y «Su talón de Aquiles».
En cada nota, además de la fotografía ya descrita se colocaba un titular, una especie de sumilla, en muchos casos biográfica, y al final un recuadro con una cita textual del candidato en la entrevista.
Siguiendo este modelo, lo que se puede destacar es la presentación de la información, pero el sesgo es evidente en la consecución de los datos y en las fotografías.
Todos los candidatos, con excepción a Correa, tenían una fotografía con la mano extendida, esto deja en claro que cada uno posó para la foto y se realizó la entrevista con ellos. Sin embargo Correa tenía una foto que se diferencia de las otras por la calidad de la imagen (principalmente en los bordes) y porque no tenía la mano izquierda (vista desde el frente) extendida. Esto a nivel gráfico, a niveles de redacción cada uno de los presindeciables, en los subtítulos ya indicados, posee una redacción que sugiere la presencia del entrevistado, ya que en varias ocasiones se colocaron lo conectores»dice, alega, manifiesta».
En el caso de Rafael Correa, lo que se escribió denota que no estuvo presente en las entrevistas, pues se tomaron citas de analistas como Simón Panchano o la catedrática Patricia de la Torre. En el subtítulo «Su talón de Aquiles» escribieron lo siguiente: «El Presidente tiene un carácter explosivo y proclive a la confrontación. Eso le ha creado más de un enemigo, dentro y fuera de su proyecto. Según ex colaboradores, su mal carácter ha provocado algunos despidos y muchas vergüenzas públicas de quienes, a su criterio, no cumplen a cabalidad su trabajo.», como se puede notar, no es algo que se toma como «Talón de Aquiles» y nunca se utilizaron frases dichas por Correa.
De igual manera en el subtítulo «Lo que quiere olvidar» se redactó: «Al igual que varios gobiernos del pasado, el suyo ha sido cuestionado por tener a familiares en cargos políticamente estratégicos. La familia le ha traído más de un dolor de cabeza al Presidente. Su primo Pedro Delgado, ex presidente del Banco Central, confesó que había falsificado su título de economista en medio de una ola de críticas a su gestión pública. (…)», y en esta parte se tomaron la autoría de una pregunta que debe ser respondida por el sujeto noticioso, que sería el candidato a presidente por Alianza País, Rafael Correa.
En todo caso, fue un disfráz mediático que sólo cumplió la forma (entrevistar a todos los candidatos en el mismo espacio y con el mismo formato), pero en los contenidos de estas entrevistas «imparciales», es notoria la fijación. Además es jugar a una imparcialidad ambigua para sentir que cumplieron la tarea y que tienen un 10 en la clase de «quien sabe cómo engañar mejor a la audiencia».
¡FELICIDADES!
Hace mucho tiempo que se abolió la teoría de la Aguja Hipodérmica cuando se realizaron teorizaciones sobre el estudio de la audiencia y la recepceción del mensaje, es decir, suponer que la audiencia es pasiva es retroceder a varias épocas y burlar a quienes son -o suelen ser- lectores asiduos.